El alcalde Antoni Noguera ha inaugurado unas jornadas para analizar la nueva Ley de Contratos, que ha entrado en vigor, bajo el título ‘Contratación y consumo responsable en las administraciones’.
Las jornadas, organizadas por el área de Función Pública y Gobierno Interior, se han celebrado en el centro Flassaders y pretenden analizar la nueva normativa “como herramienta para la transformación del entorno social y económico”, según ha explicado el Ayuntamiento en una nota informativa.
Hemos participado en las jornadas. Aquí os dejamos unas notas informativas:
El ayuntamiento de Barcelona camina con paso firme hacia una compra pública responsable. Para ello introduce la gestión cívica de espacios públicos, e internaliza los servicios, fomentando la concertación pública social y/o concertación pública-comunitaria. En definitiva, proteger la gestión pública de lo mercantil.
Jordi López, compañero en Deixalles y representante de REAS Balears, ha destacado :
- Las posibilidades de reserva de mercado para empresas de inserción que abre la ley nueva de contratación publica
- Las empresas inserción representan la política activa social
- Algunos de los artículos contemplan la diversidad de valoración mas allá de criterios económicos, incorporando la posibilidad práctica de criterios sociales, ambientales
- Las ofertas públicas tienen que recoger la aplicación del convenio sectorial. La administración no puede licitar por un valor inferior al del convenio
- Es una dimensión estratégica que implica: liderazgo político, consenso, diálogo con el sector, seguimiento, revisión de cuentas, revisión de criterios
Animamos a las administraciones publicas que exploren la ley y la desarrollen.
Experiencias del Ayuntamiento de Valencia, del Consell de Menorca, y Ayuntamiento de Menorca.
La contratación pública ronda el 20% del PIB. El que las administraciones incorporen criterios sociales, ambientales y laborales es una manera de promover cambios y andar hacia modelos más responsables.
A pesar de las posibles dificultades de aplicación nos vamos con la idea de que es una ley avanzada con grandes potencialidades.
Acabamos con la época economicista, en la que ha primado la calidad sobre el precio. Ahora ponemos en valor los aspectos sociales: dar trabajo a mujeres, ocupar mas personas en lugar de tecnología, que se implementen mejoras a los trabajadores.
Ante la elaboración del Gobierno de un futuro plan nacional de compra pública sostenible se tienen que hacer alianzas con los ejemplos actuales. Y crear una plataforma colectiva participativa de buenas prácticas:
– Unidades de compras coordinadas entre ayuntamientos pequeños
– Elaborar una mesa de densidad de oferta del sector social
– Establecer una reserva de mercado mas amplio para cooperativas, PIMEM, y empresas de inserción
-Establecer trazabilidad de los productos que usan las administraciones
